Lo mejor son las mesas frente al escenario, permiten disfrutar de conciertos con mucha cercanía al artista, el resto de la sala tiene una visibilidad muy reducida y no muy buena acústica.
Sitio clave de la vida musical en Madrid. Grandes del jazz, también del folk, como Eliseo Parra, han pasado y pasan por aquí. También es un sitio ideal para charlar tomando café a media tarde.
Un museo moderno que armoniza con la arquitectura histórica. Muestra una parte de la riqueza cultural de esta provincia, que no es poca.
Nuestro entrañable y querido teatro. Cine durante muchos años, resurgió como ave Fénix de sus cenizas. Hoy, pese a ser muy pequeño, es el mayor templo de la vida cultural zamorana.
Tenemos la Perla del Duero que es la catedral románica y también la Valenciana, que es la catedral del helado en esta nuestra ciudad.
Comida casera a buen precio y bien hecha. Raciones generosas y aunque suele haber colas, atienden muy rápido pero con total cortesía. Recomiendo 100%.
Interesante la pequeña historia que se encierra aquí. Una sorpresa dentro del metro. Bueno y breve el vídeo que lo presenta y los restos expuestos de forma muy digna.
Qué no se ha dicho ya del Prado... Si tiene tiempo visite alguna de las salas menos conocidas, como la dedicada al arte románico.
Terraza en una calle tranquila, agradable. Suelen poner tapas de lacón, aunque a veces sólo unas patatas. Si comes, te suelen invitar a chupitos. Son portugueses, buena gente.
Mítico sitio asturiano, se come bien, ponen pincho y su dueño es un crack.
Tapas originales y bien elaboradas. Calidad y buen precio. El mejor tapeo de Zamora.
Pide uno "que sí', que está tierra es de picante. Superclásico imprescindible del tapeo zamorano.
Es un buen edificio para exposiciones, las ha habido muy buenas, como la de Chagall, pero ha ido a menos.
